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Vuelos low cost
Afirman que el Aeropuerto de El Palomar es seguro |
- Rechazan pedkido de un fiscal para cerrarlo
¿Es seguro el aeropuerto de El Palomar, de donde despegan las aerolíneas low cost? Según la Administración Nacional de Aviación Civil, sí lo es, a pesar de las observaciones de un fiscal federal que, el pasado lunes, solicitó que se suspendan las operaciones en la base aérea hasta que se investigue si hay riesgo para "la seguridad pública".
Ese día, el fiscal federal Jorge Di Lello también reiteró el reclamo de que se interrumpan los vuelos de Flybondi. Un pedido que ya había hecho la semana pasada, después de que la parte trasera de un avión de esa línea aérea golpeó con la pista cuando carreteaba para despegar en Misiones.
Pero esta vez, el fiscal apuntó también contra el Aeropuerto de El Palomar, a raíz de una presentación judicial que hizo un grupo de vecinos pidiendo que se suspendan las operaciones.
Este martes, fuentes del Ministerio de Transporte de la Nación -del que la ANAC depende como organismo descentralizado- respondieron punto por punto los argumentos del fiscal.
Uno de ello es “el riesgo potencial del polvorín militar en inmediaciones de El Palomar”. Desde el ministerio explicaron que las Fuerzas Armadas y la Policía Federal vaciaron todo el material explosivo de los polvorines cercanos y que eso quedó acreditado en el expediente judicial. También aclararon que esto se hizo antes de la inauguración del aeropuerto, en el mes de febrero.
Di Lello también mencionó como un problema la “cercanía de instituciones educativas en la aproximación del despegue y aterrizaje de los vuelos”. Pero desde Transporte aseguran que el aeropuerto cumple con todas las normativas para poder operar, incluyendo las distancias que debe guardar con respecto a otras construcciones.
Otro punto observado por el fiscal son los “conflictos en seguridad operacional del tráfico aéreo”. Además, Di Lello cuestiona la falta de relevamientos previos a la habilitación de la terminal de El Palomar, en especial en lo referido al estado de la pista y al Sistema de Aterrizaje Instrumental (ILS, por su sigla en inglés), que dificulta la operatividad del aeropuerto cuando se dan malas condiciones climáticas.
Están realizando un ajuste en el Sistema de Aterrizaje Instrumental para que los pilotos puedan aterrizar aún con una visibilidad de 1.200 a 1.400 metros.
Desde Transporte subrayan que "la suspensión de vuelos por climatología adversa se produce cuando hay baja visibilidad. Justamente es una medida de seguridad que se cancelen los vuelos para que los pilotos no tengan que aterrizar con la visión comprometida". Para esos casos, a partir del 15 de agosto comienza a funcionar una nueva tecnología que les permite mayor visibilidad. Esto evitará, dicen, cancelaciones, y mejorará la eficiencia del aeropuerto.
Actualmente, el aeropuerto de El Palomar opera con una visibilidad de 2.700 metros. Para mejorar la eficiencia, están trabajando en el corrimiento de un elemento del ILS que, sumado a mayor balizamiento, posibilitará el aterrizaje con una visibilidad de 1.200 a 1.400 metros.
El fiscal Di Lello consideró que todas las circunstancias que mencionó en su pedido escapan a un simple hecho fortuito, hacen a la seguridad pública y deben tener respuesta de parte de la justicia a quien se reclama su intervención.
En un escrito presentado por la ANAC ante la Justicia, se sostiene que "el juez subrogante Adrian Charvay (juzgado federal N° 2 de San Martín) puntualizó “que la presentación que diera origen a estos actuados no contiene una mínima reseña de las circunstancias de tiempo, modo y lugar de las irregularidades denunciadas. Mucho menos una breve investigación preliminar que las determine. Tan solo se cuenta con cita de notas periodísticas”.

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Colosal Mentira |
Engañaron al pueblo, le mintieron con alevosía a sus propios votantes.
Prometieron públicamente y con fervor religioso desde la Presidencia de la República moderar el gasto del Estado, evitar el despilfarro, no aumentar los impuestos ni crear otros nuevos, reducir a su mínima expresión el uso de la locomoción oficial, y convertir el aeródromo de Melilla en un aeropuerto semejante al Aeroparque de Buenos Aires.
A vuelo de pájaro, también prometieron que volverían los cisnes a navegar en un recuperado Arroyo Pantanoso que acrecentó su ruina; que la Educación sería profesionalizada, y que serían construidas y entregadas en el período decenas de miles de viviendas.
En materia de hurtos y rapiñas el gobierno prometió reducirlas en un mínimo de 30%, cuando en los hechos, entre 2015 y 2018 las rapiñas crecieron un 36,7%, mientras que los hurtos aumentaron 33,6%. Los homicidios, en tanto, treparon al 40%.
Igualmente prometieron que sería detenida la emigración de las familias, cuando es público y notorio que se fueron del país decenas de miles de uruguayos entre 2005 y 2018.
Aseguraron que no habría más ajustes fiscales, y que sería absolutamente trasparente la gestión pública. No se acudiría al rescate de las empresas fundidas; se velaría por el cuidado ambiental, y se reduciría el déficit de las empresas del Estado. Nada de esto se hizo.
Aplicaron a rajatabla la frase atribuida a Maquiavelo: “el fin justifica los medios”, y se alzaron con el gobierno a costillas de la credibilidad popular.
Uniformaron la pobreza, le dieron statu quo; están destruyendo la clase media, y fomentan a más no poder la holganza y la vagancia en todo el país.
“En las acciones de los hombres, y particularmente de los príncipes, donde no hay apelación posible, se atiende a los resultados. Trate, pues, un príncipe de vencer y conservar el Estado, que los medios siempre serán honorables y loados por todos; porque el vulgo se deja engañar por las apariencias y por el éxito; y en el mundo sólo hay vulgo, ya que las minorías no cuentan sino cuando las mayorías no tienen donde apoyarse”.
Cumplen fielmente el postulado maquiavélico. Facilitan, encubiertos, la deserción estudiantil; por omisión e ineptitud la delincuencia organizada, el auge del narcotráfico, y a sabiendas el crecimiento descontrolado de los asentamientos, villas y miserias, en cumplimiento de una política de expansión tutelada y financiada, imprescindible para su prevista continuación en el poder.
La sucesión de huelgas docentes afecta en grado superlativo la educación primaria y secundaria, al punto que los estudiantes egresan de la escuela sin saber leer con fluidez, y menos restar, multiplicar y dividir. Y del primer ciclo secundario sin comprender lo que leen.
El gobierno despilfarra a trochemoche los dineros públicos, y sigue gastando, -inmutable Astori-, muy por encima de las posibilidades nacionales. Lo peor, que constituimos un país que soporta una carga impositiva terrible, con el agravante de que los servicios públicos mal esconden más gravámenes impositivos que desdibujan su cometido social.
Las tarifas de la electricidad, gas, naftas y teléfonos son las más caras de la región, y compiten para alcanzar a ser las más onerosas del mundo.
Endeudaron con irresponsabilidad manifiesta el país, y atiborraron de funcionarios las empresas públicas. Ante la descomunal deuda externa del Uruguay, 60 mil millones de dólares, cachafaces y bribones sostienen que no hay por qué preocuparse: “la deuda no se paga, se administra”.
Desfigurado el Poder Legislativo, hoy baluarte del Poder Ejecutivo; maniatada la Justicia, afín al gobierno, que arregla con suculentas retribuciones los cargos judiciales de mayor relevancia, el Uruguay se despide de la división de poderes.
El engaño colosal y colectivo que le endilgamos al Frente Amplio, sin atenuantes, determinó el uso y abuso de los brazos enyesados de la mayorías frenteamplistas durante todo el período; la subordinación consecuente a simple vista del Poder Legislativo al Poder Ejecutivo, y el coqueteo desenfadado del Poder Judicial, también afín al gobierno, tal cual se advierte en la gestión complaciente, acomodada y servicial de la Suprema Corte de Justicia.
Abundando, no debe obviarse que la maquinaria legislativa está orientada por el accionar de las grandes corporaciones. Los políticos del siglo XXI, como bien lo enseña el Dr. Salle, son empleados muy bien pagos de estas instituciones internacionales que han tomado al Uruguay como conejillo de indias.
La bancarización obligatoria, so pretexto de controlar la evasión fiscal, ha puesto de rodillas el país, entregado por este gobierno a las ocurrencias y dictámenes siempre nefastos y perjudiciales de la banca internacional.
Concluyendo, el porvenir político del Uruguay, de cara a las próximas elecciones nacionales, ha sido perfectamente dibujado por el poeta y compositor Enrique Santos Discépolo:
“Si uno vive en la impostura
Y otro roba en su ambición,
Da lo mismo que sea cura,
Colchonero, rey de bastos,
Caradura o polizón”.
Ricardo Garzón
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