• El covid-19 se ha politizado; la industria aérea pagará las consecuencias.
• Los políticos detuvieron la aplicación adecuada del CART, por la desconfianza suscitada entre los gobiernos a nivel mundial.
  
• Los gobiernos no confían entre ellos y los políticos han erosionado la confianza del público para viajar.
• El virus se ha politizado y eso no es algo saludable. La OACI debió de tener un poco más de liderazgo.

La Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) realizó un trabajo extraordinario con el Informe del Grupo de Trabajo de Recuperación de la Aviación (CART) para establecer lineamientos con los que los países podrían enfrentar la crisis de la pandemia del Covid-19 y ayudar a la industria aérea, sin embargo, ningún gobierno siguió a la OACI, señaló Jeff Shane, ex consejero general de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA).
En el marco de una serie de conferencias realizadas por la consultora australiana CAPA, Eamonn Brennan, director general de Eurocontrol, coincidió con Jeff Shane: todos los Estados han tenido diferentes respuestas para enfrentar al virus, lo que ha provocado caos a nivel mundial.
“Es una catástrofe. En Europa, normalmente tendríamos 37 mil vuelos en un día ocupado; ayer tuvimos 12 mil 733. El virus se ha politizado: los Estados han tomado decisiones para enfrentar al virus de forma internacional, con base en asuntos locales”, apuntó Brennan.
Por su parte, Jeff Shane señaló que no hay una nueva solución institucional que pueda resolver la crisis en la industria aérea por la caída en la demanda tras la pandemia del covid-19. La solución ideal era el CART, indicó. “El problema es que nadie lo siguió”.
“El CART fue hecho de una forma muy rápida, y dice exactamente lo que esperábamos que dijera: que los gobiernos tienen que confiar entre ellos, que las personas que van a entrar a sus territorios no van a infectar a sus poblaciones. Sin embargo, era un sueño. El CART fue realizado por especialistas a nivel mundial, que crearon lineamientos con conocimiento sobre cómo reiniciar la industria aérea, pero los gobiernos, los políticos, detuvieron su aplicación adecuada”, apuntó.
Posteriormente, Shane señaló que es lógico que los políticos no se adhirieran al CART porque están haciendo lo que creen que es mejor para la gente de sus países, además de que, si la situación empeora, ellos son los que pagan las consecuencias. “Sin embargo, las consecuencias para la industria aérea serán trágicas. Hay algunos países que ya perdieron sus aerolíneas, que ya no tienen conectividad”.
El director general de Eurocontrol añadió que los gobiernos no confían entre ellos y que los políticos han erosionado la confianza del público para viajar.
“Hay politización del virus y eso no es algo saludable. Además, la OACI debió de tener un poco más de liderazgo. La OACI y la Organización Mundial de la Salud tienen la posibilidad de darle a los políticos la protección que necesitan; en cambio, los están dejando solos”, finalizó Brennan.