• (Mentiras de Cepal... más comunes de lo que se piensa...)

El insigne poeta español León Felipe, o pecaba de optimista, o pecaba de soberbio.
Es absolutamente imposible saber o siquiera vislumbrar todas las mentiras que puede elucubrar el ser humano, su mezquindad y sus instituciones.
Lógicamente, es mejor que la Sra. Secretaria Ejecutiva de la Cepal se disculpe ante gruesas mentiras estadísticas a que no lo haga.
Ahora, ¿será la primera vez, o nuestras falsas cifras "africanas" emanadas de ciertos organismos internacionales -falsamente impolutos- nos han perseguido al menos ,durante más de medio siglo?
Realmente, habría que ser tarado, corrupto o sinvergüenza para creer que Uruguay -cualquiera fuera el gobierno- invertiría menos que Haití ante la pandemia. Solo un mal bicho o egresado del Vilardebó creería tal dislate. Esto es nuevo??
Evidentemente no! Y no depende sólo  de las simpatías izquierdistas de la Dra. Bárcenas (desde Marina Arismendi a los Castro), que, creemos, tampoco se querría incinerar con tal animalada. Podemos preguntarnos, sí, sobre la deslealtad de algún contertulio nacional -insisto, y que me disculpe Manini, más jodidos que los gringos...- al proporcionarle alguna cifra incorrecta. Más o menos, igual a la manija que otros uruguayos le dan a la cuestionada Comisión Interamericana de Derechos Humanos o a la murga del Tratado de Roma, que si no, ni sabrían donde quedamos. Como es usual, el problema no son los malos europeos, sino los peores locales!
En el otro extremo están los que hace décadas nos quieren convencer acerca de que el mundo tiene sus lupas mirando y admirando a esta vieja Banda Oriental, aunque prefiero un poco de orgullo, que la falsa humildad artera y soberbia de la barra del "paisito", llantos murgueros y enanos llorones incluídos.
Sin embargo, me voy a centrar en los que exageran para abajo (y no es que Uruguay no haya decaído geométricamente en el último cuarto de siglo, ídem académicamente, Urssdelar a la cabeza...)
El tema de equipararnos falsamente con Haití es recurrente hace décadas! Y utilizado politicamente hasta el hartazgo.
¿O no se organizaron manifestaciones, levantamientos de firmas  y plebiscitos, bajo la mentira de que Uruguay gastaba menos que Haití y hasta menos que el continente africano en Educación o Salud?? Estoy mintiendo?
¿No sucedió cada vez que quisieron aumentar el presupuesto para sus santuarios (claro ,que la Urssdelar baje año a año en sus calificaciones,y que nuestros cursos de Medicina sean mal mirados en muchas partes del mundo, excluyendo progresivamente materias como Farmacología o Genética, no importa) o pretextar algunos paros salvajes preelectorales?
No obstante, cuando nos preguntábamos -año tras año- quién en su sano juicio podría creer esa barbaridad, constatábamos que decenas de miles de ilusos o casi enfermitos se sumaban, con sus lamentos y sus reiterativas caras de circunstancias a esa visión delirante. Inclusive, la tontamente denominada "prensa responsable" (adjetivo estúpido, si los hay), invitando a "sesudos" y frígidos panelistas, que repetían la letanía del Uruguay haitiano, tras sus pálidos rostros frígidos y sus lentes culo de botella....
Perdí la cuenta de cuántas veces salió la barra a agitar por un % para la Universidad,y, obtenido, para un % + "X"...
Y ahí está el tema, y la gran verdad que omitimos!
Difícilmente un gobierno de la tendencia que fuere negaría mejores recursos a institutos como el Clemente Estable, el INIA, el de Investigaciones Pesqueras y similares. El problema es cuando se pide un presupuesto al barrer para TODA la educación, sin entrar a detallar. ¿Qué están pidiendo, bajo una pretendida aura de santidad?
¿Más y más plata para una Universidad que se niega -caso mundialmente único- a exámenes de ingreso o a limitar los lugares en los cursos saturados y de escasa perspectiva? ¿Diseminar esas mismas opciones en el interior? ¿Seguir llenando al país de abogados, escribanos, contadores, politólogos, licenciados en Ciencias de la Comunicación raramente especializados en Comunicación Educativa o sicólogos mal formados? ¿Seguir aumentando el  impuesto «solidario» a los egresados para que no cambie nada? ¿Para organizar caros congresos internacionales «estudiantiles» dirigidos por un G2 cubano, gritando por Venezuela? ¿Para coronar anualmente los berrinches feminazis, LGBTIQ, o de los supuestos «mártires», en la sede de la principal casa de estudios? ¿Una enseñanza Secundaria descolgada de la realidad, desestimulante, ideologizada e indisciplinada, raramente competitiva? ¿Institutos de Formación Docente, que más parecen ghettos extremistas papelonescos, como el ridículo tablado montado el 14 de agosto frente al Ipa en que unos supuestos «uniformados», más bien salidos de los Gaychaleros de Telecataplum, hacían de verdugos de unos giles encapuchados? ¿Más recursos para teatros o cines que hace 30 años están fundidos y sólo prolongan una cara agonía que todos financiamos? ¿Más Inefops improductivos y fraudulentos? ¿Más Fondes? ¿Sostener cualquier empresa nacional, así se llamen Envidrio o Alas-U ( que algún cronista televisivo parece sugerir refundar)? ¿Para inventar más Aratiri o UPM? ¿Para aumentar las pensiones, privilegios y derechos varios a los ex tupas, Opr, etc... y sus deudos?
La mentira zurda debería ser verdad durante un mes y ver, con los miserables recursos de Haití, todo lo que se tira y se roba en este país.
Yo no sé muchas cosas, es verdad. Digo tan sólo, lo que he visto!

A medida que corren los días de la nueva administración, vamos viendo como surgen desde distintos lugares acciones premeditadas, para enfrentar al gobierno nacional. Esto es parte de una estrategia planificada desde la cúspide del Frente Amplio y con directivas del Foro de San Pablo y que lo vemos en el programa de gobierno de la IMM, cuando afirman que van a enfrentar al gobierno y agregan una serie de adjetivos típicos para generar una grieta. Son distintos hechos llevados adelante por ciertos personajes y organizaciones que durante los quince años de gobierno del Frente Amplio actuaron en forma servil no sólo por su ideología afín a estos, sino porque a su vez obtenían un provecho económico. Para la izquierda no sólo son indispensables los pobres para darles esperanzas mintiéndoles y así los vuelven a votar, sino que deben contar con el apoyo de genuflexos que operan en distintos órdenes de la vida diaria. Me refiero a comunicadores, artistas, deportistas, sindicatos, ONG, cooperativas y algún otro lobo escondido con disfraz de oveja. Hasta qué punto de servilismo llegan.
Como perdieron el gobierno nacional, están apuntando sus baterías desde la IMM y para ello cuentan con un medio de comunicación como es TV Ciudad. Recientemente han lanzado un programa llamado La Letra Chica que no es otra cosa que la versión rioplatense del conocido programa venezolano llamado Con el Mazo Dando, dirigido por el conocido narcotraficante y asesino Diosdado Cabello. Este programa de TV Ciudad, dirigido por conocidos militantes de izquierda se dedica a tirar piedras contra el gobierno nacional convirtiéndose en un apoyo político del Frente Amplio. Lo peor de todo, es que esto se hace con los impuestos que volcamos todos los ciudadanos de Montevideo. Esto es una de las tantas formas en que se derrocha nuestro dinero. Sin duda que el nombre del programa es adecuado al contenido del mismo, porque el término la letra chica se asocia con algo oculto y perverso que en ocasiones ponen en un documento y que mucha gente no lee antes de firmar. Es que la izquierda no es otra cosa que eso: algo oculto, dañino y que con gran astucia dicen mentiras disfrazadas.
Recientemente se dio a conocer un hecho que en caso de confirmarse sigue demostrando en qué manos estuvimos durante los quince últimos años. Se dice que durante el gobierno frentista el pasquín bolche de Caras y Caretas recibía U$S20.000 mensuales por parte del MEC. Todo esto para apoyar al compañero tupamaro Alberto Grille y así este poder seguir envenenando la mente de muchos inocentes
También se dijo que cincuenta artistas callejeros recibían mensualmente la suma de $20.000 por hacer representaciones en la vía pública. Interpretaban las payasadas que hacían sus dirigentes zurdos.
A todo esto debemos agregarle que hay un organismo estatal que parece un comité de base y me refiero al Instituto Nacional de Derechos Humanos. Integrado por conocidos militantes de izquierda como la ex jueza Mariana Mota, preocupada por los derechos humanos de los desaparecidos, pero no de los de aquellos que fueron asesinados por la guerrilla tupamara. También la integra Juan Faroppa militante de la Vertiente Artiguista y ex sub secretario del Ministerio del Interior en el primer gobierno de Tabaré Vázquez. Hace pocos días realizaron críticas contra el Ministerio del Interior por un procedimiento en el que según ellos se utilizó exceso de fuerza. De acuerdo a esto la autoridad debe permitir que los apedreen y los insulten. La más reciente fue el reclamo a las autoridades de la enseñanza para que permitan que el sindicato coloque carteles proselitistas dentro de los centros educativos. La izquierda no ha asumido que la permisividad que aplicaban antes los gobiernos frenteamplistas no se va a repetir. Ahora se hará cumplir con la ley y las normas establecidas. También se deberán cambiar los textos de estudio y así evitar que les laven el cerebro a los jóvenes con historias de guerrilleros como héroes nacionales y comunistas como defensores de los pobres. La gran mentira se terminó. Vayan a llorar al cuartito y esperen hasta el 2024.